2007
Un sábado primaveral cualquiera.
Un sábado primaveral cualquiera.
Afuera, las estrellas se habían ocultado tras un espeso manto oscuro, nubes que amenazaban con descargar su furia divina contra la faz de la Tierra. El sonido del frío viento nocturno silbaba entre las ramas de los árboles del jardín, mezclando su sonido con el tintineante chorro de agua que nunca paraba de caer en una alberca cercana.